¡Hola es un placer para mí encontrarnos nuevamente!, hoy quiero hablarte una vez más sobre la mentalidad emprendedora, siento la necesidad de animarte a que como mujer emprendedora, profesional del coaching/mentora, formadora online o infoproductora, tengas otro tipo de mentalidad.

Cuando trabajamos por nuestra cuenta debemos tener en primer lugar una actitud proactiva, visionaria, futurista, tener muy claro que nuestro negocio somos nosotras mismas, y que en los negocios absolutamente nada es seguro, los negocios son como nuestros hijos, necesitan atención, energía, tiempo y dinero, y por supuesto estar conscientes de que es un proceso.

Cuando somos empleadas, podríamos decir que es más fácil porque al trabajar por cuenta ajena tenemos un sueldo fijo, un horario de 9 a 5 quizás, dependemos de las demandas de alguien más, no debemos preocuparnos por la toma de decisiones porque ése alguien asume las responsabilidades, digamos que es en un cierto estado de comodidad y seguridad.

Si te soy sincera nunca he trabajado para un jefe, hablo en general, pero el punto es que el precio a pagar por esa “facilidad” es renunciar a nuestra misión de vida, a nuestras metas, perder independencia y libertad, y sinceramente si colocamos estos elementos sobre balanza, no vale la pena.

Así que puedo decirte con toda certeza que tomaste la decisión correcta al emprender, pero debemos trabajar en tu mentalidad, porque cuando somos emprendedoras debemos estar comprometidas con nuestro éxito, comprometidas con hacer lo que tengamos que hacer, trabajar lo que tengamos que trabajar, con pagar lo que tengamos que pagar, solo así cumpliremos con la misión de vida que tenemos, que es ayudar a los demás.

Esto lo he hecho en los 27 años que tengo emprendiendo y como ves me ha funcionado. Además, puedo agregar que la constancia y la perseverancia son dos características que nunca deben faltarnos, porque solamente la práctica hace al maestro.

La realidad es que no podemos asumir que si hacemos algo una sola vez nos va a salir perfecto, si te sale perfecto la primera vez ¡mundial!, pero normalmente esto es prueba y error, o sea tienes que probar muchas cosas para ver qué es lo que realmente sientes como tuyo, porque hay muchas estrategias, puedes inventar o implementar muchas cosas, pero aquí lo importante es que tú lo sientas como tuyo.

Es importantísimo que no copies a nadie, no hay nada más hermoso que ser tu misma y proyectar tu esencia, ¿Puedes modelar el trabajo de otros?, sí, pero siempre impregnándolo de ti, hacerlo tuyo, trabaja según las necesidades de tu nicho, esta es sin duda la mezcla perfecta, hacer lo que amas mientras ayudas a tu comunidad, que tu mentalidad sea de ¡Yo soy una líder, yo lo puedo lograr, puedo ayudar a la humanidad con mi misión!

Ten una mentalidad de una mujer que toma decisiones en el momento indicado, porque las emprendedoras tenemos que tomar decisiones, yo tengo 27 años emprendiendo y 27 años tomando decisiones todos los días, y a veces, hay que tomar decisiones que no nos gustan pero que hay que tomarlas porque nuestro negocio depende 100% de nosotras.

Es por esto, que debemos estar allí para hacerlo crecer, sobre todo cuando somos pequeñas empresarias, como lo soy yo, como seguramente lo eres tú también, entonces es un hecho que debes tener una mentalidad de perseverancia, una mentalidad de ganas de ayudar a la humanidad con tu misión, esa mentalidad de lo voy a lograr porque sí, porque me lo merezco.

La mentalidad emprendedora te hará poner los precios que tu sientas que van contigo y no colocar los precios porque “no se quien” lo puso a 4750 o a 27, solo por miedo a salirte del mercado, porque no se trata de lo que hagan los demás, no si tu das excelencia y sabes que todo es un proceso, ya sea que tengas 2 años emprendiendo o que estés comenzando, si no quieres ponerte precios muy económicos entonces debes trabajar muy bien en tu propuesta de valor.

Tener una buena propuesta de valor como idea de negocio, hace parte de tener una mentalidad emprendedora, porque no podemos pensar en vender lo mismo que hace cualquiera, a los precios que tienen los demás, en no tener una propuesta diferenciadora y que así vamos a crecer, no, esa no debe ser tu mentalidad, esa no es la mentalidad emprendedora de la que te estoy hablando. Así que, te animo a repetir conmigo:

• Yo voy a hacer lo mejor.
• Yo voy a dar la excelencia.
• Yo voy a ayudar a mi nicho de mercado.
• Yo voy a ser sincera, voy a dar honestidad.
• Yo me voy a crear una propuesta de valor diferenciadora grandísima.
• Yo voy a vender alto valor, porque yo me lo merezco, porque estoy dando lo mejor de mí.

Así es como debemos trabajar para tener una mentalidad emprendedora, y jamás mantenerte chiquitita, sin invertir en tu negocio, porque si no inviertes en tu negocio no vas a crecer tan simple como eso, porque el dinero llama dinero, y para crear dinero se necesita dinero, y no te hablo de millones y millones de euros porque no, porque yo comencé sin tener casi dinero, pero sí tienes que invertir en ti, invertir en tu negocio, invertir en herramientas, porque los negocios necesitan inversiones de tiempo, energía y dinero.

¿Por qué tiempo? bueno porque emprender es un proceso, ¿Por qué energía? Porque no puedes trabajar 2 horas y pretender ganar 100.000 euros porque no los vas a ganar, tienes que darle a tu negocio tu tiempo y energía, así como una mentalidad emprendedora para tener éxito y seguir creciendo.

Ahora bien, quiero darte unos tips prácticos para que puedas ejercitar tu mentalidad emprendedora:

1. En primer lugar, si quieres dinero rápido y seguro, entonces necesitas un empleo, porque emprender es un camino con incertidumbre, pero en el que absolutamente todo es posible, solo debes estar dispuesta a salir de tu zona de confort.

2. No emprendas con la mentalidad de ganar más trabajando menos, esto es un error, emprende porque así tendrás la oportunidad de seguir tus pasiones, desarrollar tus proyectos, ayudar a la humanidad, y porque serás fiel a ti misma y a tus sueños.

3. Aventúrate a superar tus propios límites, explota todo tu potencial, imprímele esfuerzo y mucha energía a cada tarea que debas realizar para lograr tus objetivos.

4. Organízate, administra bien tu tiempo para que seas más productiva, discierne entre lo urgente y lo importante, así obtendrás resultados palpables.

5. No te enfoques en los resultados, pon tu atención en las oportunidades, no digas “no puedo porque no tengo suficiente dinero”, en su lugar pregúntate cómo puedes hacerlo.

6. Practica un lenguaje proactivo: Lo haré, puedo mejorar, lo considerare, quiero hacer esto. De este modo, evitaras el lenguaje reactivo: Lo intentare, yo soy así, tengo que hacer esto, no puedo hacer nada, mejor mañana.

7. Es importante que tengas capacidad de armarte de un equipo con los mejores, de modo que puedas delegar responsabilidades, y producir más valor en menor tiempo.

8. Ahorra para invertir, recordemos que un negocio sin inversión no crece, entonces debes hacer de esto tu enfoque del día a día, y jamás ahorres para gastar, eso no hace parte de una mentalidad emprendedora.

9. Nunca tengas el mal hábito de buscar culpables, asume tus responsabilidades y enfócate en generar soluciones.

10. El mundo está en constante cambio y no podemos darnos el lujo de estancarnos o será el comienzo del final de nuestro emprendimiento, así que, en vez de temerle al cambio, comienza a gestionarlos, reinvéntate, evoluciona y saborea el éxito.

11. No hay mejor forma de emprender que rentabilizando eso que te gusta, haz de tu pasión tu capital de inversión, cumple con tu misión de vida.

Estos son ejemplos prácticos, recopilados de mis experiencias y que he decidido obsequiarte, porque la mentalidad emprendedora no es algo que puedas activar como se activa una funcionalidad en tu Smartphone con solo hacer clic en una aplicación, la mentalidad emprendedora se procura, se trabaja, día a día y yo puedo ayudarte, porque esa es mi misión de vida, ayudar a mujeres emprendedoras en las cuales me veo reflejada, que tienen ese ímpetu para atreverse a apostar por sí mismas.

Sé que tú querida amiga, que me estás leyendo lo tienes, así que permíteme darte unos últimos consejos por el post de hoy, rodéate de personas que te sumen, personas que te motiven a dar lo mejor de ti, personas que crean en ti y en tu potencial, no está de más hacer mención al dicho “dime con quién andas y te diré quién eres”, lee libros, asiste a conferencias, participa en mentorships, conoce personas de influencia, edúcate todos los días, invierte en ti, llénate de valor para que puedas aportárselo a tu comunidad, porque recuerda, no se trata de vender un servicio se trata de vender alto valor que ayude, que cambie vidas y aporte las más gratas experiencias.